Si hay algo que no se puede negar es que Michael Bay sabe como convencernos para que acudamos al cine en masa para disfrutar (o lamentarnos) de su última superproducción de coches explotando por los aires. La primera parte de ‘Transformers’ tenía al menos un par de poderosas razones a su favor que dejaré a vuestra imaginación. La segunda parte bien podría haberlo mandado todo al diablo por culpa, y no lo digo yo sino su director, de un guión pobre donde los haya propiciado por la huelga de guionistas que sacudió Hollywood. Y ahora, la tercera, bueno… ved el tráiler y me contáis.
¿Ya lo habéis visto? Bien, pues ya sabéis qué película vais a ver (muy probablemente) el 1 de julio:‘Transformers: Dark of the Moon’, una nueva entrega en la que Bay asegura haber aprendido de sus errores y en la que todo es tres veces mayor: las explosiones, los robots y los implantes de silicona de los morros de Rosie Huntington-Whiteley, la sustituta como novieta de turno de Shia LaBeouf ahora que Megan Fox ha caído en desgracia.
En cuanto al argumento, esto es lo que sabemos hasta ahora: cuando un misterioso acontecimiento del pasado de la Tierra sale a la superficie, nuestro planeta se convertirá en el campo de batalla de una guerra de tal magnitud que ni tan siquiera los Transformers serán suficiente como para salvarnos.
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